lunes, 2 de julio de 2007

Desde Madrid: Lecciones para crear una galaxia



Cuatro años de sequía dan para reflexionar mucho; para conocer cuáles han sido los fallos y cuáles los aciertos, y sobre todo, para intentan enmendar esos errores cuanto antes. Ha sido una etapa muy larga, con muchas malas noticias, titulares negativos, y ningún motivo de alegría. Una etapa que empezó con el “Zidanes y Pavones” y ha terminado con la vuelta de “las mocitas madrileñas”.

En Madrid se creó una galaxia, por encima del mundo real en el que nada era lo que parecía. Un presidente sobrenatural, un director deportivo –varios- con pocas funciones, y muchos, muchos, entrenadores y jugadores. Desde la llegada de los Zidane, Figo, Beckham, Ronaldo, hasta la Liga 2006-2007 han pasado muchas cosas, y pocas han sido buenas. El haber ganado este título, es para el madridismo la mejor medicina. Es como cuando te despiertas después de una larga pesadilla. Ha sido, sin duda, un alivio.

Y por eso, ha supuesto el fin de una era en la que lo más glorioso fue el famoso gol de Zidane en Old Trafford. El francés se retiró un año antes, hastiado del fútbol, harto de la vida endiosada que creó el ser supremo para sus pequeños vástagos. Se fue él, Figo, se marchó Ronaldo, ahora Beckham, y todos los restos a otros tiempos que quedaban en el vestuario como Roberto Carlos. Pero lo más significativo es que entre febrero del pasado año y junio de este se ha desmontando la realidad virtual de los galácticos. Pavón, quien sustentó esa fantasía de combinar el futuro del club con los mejores jugadores del mundo, se marcha, sin ganas de triunfar, y con un lema que pesó mucho sobre sus cualidades futbolísticas.

Zidanes y Pavones, Henries e Iniestas....es lo mismo. El Barcelona ha visto las orejas al lobo. Se ha visto disfrazado con la cara del Madrid de las últimas cuatro temporadas, y se ha echado a temblar. Ha hecho cuatro fichajes a bombo y platillo y ha anunciado que “lo ganarán todo”. Ese fue el error de la capital. Ir a Cibeles antes de empezar la temporada. La fórmula maldita que encumbró a un presidente no es la buena. Laporta tiene muchos rasgos de este presidente que llegó, vio, y como no venció salió por la puerta de atrás dejando la hoguera encendida. Después llegó el bombero Capello, quien ya había apagado hace diez años un fuego similar. Hizo su trabajo y se marchó. Sin raíces, sin problemas, sin ni tan siquiera un adiós emotivo – como el de Luxemburgo-.

El madridismo pide a gritos jogo bonito, y el alemán se lo puede dar, porque es entrenador de equipos, no de jugadores. Este Real Madrid tiene pinta de equipo, de unión, de piña. Se ha limpiado de raíces secas y ahora vendrán – cuando vengan- nuevas simientes. Yo les doy confianza. Pero también doy un consejo a la otra acera. Aprendan de los errores. El Real Madrid ha dado, durante cuatro larguísimos años, grandes lecciones para fracasar.

Periodista encubierto/a de Madrid

1 comentario:

Anónimo dijo...

Oi, achei teu blog pelo google tá bem interessante gostei desse post. Quando der dá uma passada pelo meu blog, é sobre camisetas personalizadas, mostra passo a passo como criar uma camiseta personalizada bem maneira. Se você quiser linkar meu blog no seu eu ficaria agradecido, até mais e sucesso. (If you speak English can see the version in English of the Camiseta Personalizada. If he will be possible add my blog in your blogroll I thankful, bye friend).