(El paréntesis): Gasol y el Pibe

Martes, 21.30. Recibo una llamada de la redacción de Madrid pidiéndome algo para tratar el tema de Gasol de esta noche. Tener a un protagonista y estar en Sant Boi para palpar el ambiente previo al debut de Pau con los Lakers.

Comienzo a mover temas. Llamo al ayuntamiento y a la radio de Sant Boi para saber si hay algo programado. Nada de nada. Así que el tema ambiente veo que será complicado.

En cuanto al protagonista, me hago con el teléfono del primer entrenador de Pau, cuando tan solo tenía 9 añitos. Se llama Ricard Farrés, y es profesor de la escuela Llor (donde estudió el amigo). Le digo de quedar, para hacer la previa junto a él y mirar algo del partido. Desde Madrid me dicen que no, que yo esté en otro sitio y que ellos ya llamarán al señor Farrés para meterle en directo.

22:40. Cojo el coche y me dirijo a Sant Boi. La primera parada es la Rambla, la calle central, donde está el ayuntamiento y los bares que, en teoría, cierran más tarde. Entro en el primero y pregunto si mirarán el partido. La repuesta es breve: “no, cerramos ya”.
Salgo a la calle y pregunto por algún otro bar. Entro en el que me han dicho y la respuesta es brutal: “a nosotros nos la pela el Gasol este”. Cabe decir que la que me lo dijo tenía más pinta a cantante de La Polla Records que cualquier otra cosa. Pero bueno… sea como fuere también es el sentir del pueblo.
Y sigo… y nada.

23:40 Se me hace tarde y no encuentro ni un solo bar abierto. Me dejo medio depósito dando vueltas por la bonita población y nada de nada. No hay manera.

00:00 Recibo una llamada de David Bigorra preguntándome qué estoy haciendo. Le digo que estoy en Sant Boi, buscando algún bareto para hacer una crónica de ambiente. Se apunta. Está loco.

00:35 He encontrado algo, pero espero a David que llega con retraso porque se ha medio perdido. Le digo que ya tengo el sitio y nos dirigimos al local. Se llama El Pibe y tiene luces rojas. Sí amigos, luces rojas.
Le transmito a Madrid que estoy en la puerta de un local “sospechoso” que es lo único que hay abierto en Sant Boi. Aviso de que voy a entrar y que haré la conexión desde ahí. La cosa gusta por lo curioso del tema.

00:50 Nos pedimos una cerveza, nos sentamos y David cena un plato de patatas (que no una patata…). Nos sentamos y comenzamos la habitual charla de actualización de nuestras vidas.

1:20 Josep Pedrerol me da paso. Me pregunta dónde estoy y se lo cuento mientras suena de fondo una canción de regetton de esos baratos. Conexión surrealista donde las haya. Risas en el estudio y bromas de los colaboradores. Hay poco que contar más que hay cuatro borrachos y un par o tres de chicas en la barra. Pero he cumplido. Querían ambiente y lo han tenido. Querían la realidad del pueblo y esa es que a la 1:20 sólo había ese bar abierto.

1:45 Decido llamar a Ricard Farrés para preguntarle si está viendo el partido. Me dice que sí, en un bar que se encuentra en la carretera de Viladecans. Le pido algunas indicaciones y me guía con cierta dificultad.

02:20 Después de dar 25 vueltas por toda la comarca del Baix Llobregat encontramos el Bar Eire, una tabernita irlandesa donde sólo quedaba el propietario y Ricard. El partido ya había empezado. Nos tomamos otra consumición y hablamos del pasado del crack.

Nos contó historias buenas de verdad. Historias que os relatará el amigo David Bigorra, que libreta en mano no dejaba de ser periodista hasta cuando estaá de descanso.

Gran noche.